¿Te ha pasado que terminas el día agotada, pero no tienes idea de qué hiciste realmente?
¡Bienvenida al club de las ocupadas sin propósito!
Hoy vamos a hablar de productividad real, pero con humor, porque si no nos reímos, nos echamos a llorar… encima de una lista infinita de pendientes que ni sabemos de dónde salieron.
¡Bienvenida al club de las ocupadas sin propósito!
Hoy vamos a hablar de productividad real, pero con humor, porque si no nos reímos, nos echamos a llorar… encima de una lista infinita de pendientes que ni sabemos de dónde salieron.
Estar ocupada es el nuevo “estoy bien, gracias”
Vivimos en modo automático. Si alguien te pregunta “¿Cómo estás?”, la respuesta es:
¡Ocupadísima!
Pero ocupada haciendo qué, amiga mía… ¿de verdad estás avanzando o solo estás corriendo en círculos como hámster con agenda?
No por tachar 12 cosas en tu lista significa que estás más cerca de tu propósito. Puede que solo hayas hecho 12 vueltas inútiles alrededor de tus miedos disfrazados de “tareas importantes”.
El multitasking es un mito (y un vicio encubierto)
Te cuentas a ti misma que eres buena para hacer muchas cosas a la vez.
Pero lo que en realidad estás haciendo es:
- Respondiendo WhatsApp mientras intentas meditar.
- Escribiendo un receta mientras escuchas un reel sobre cómo escribir una receta.
- Preparando el almuerzo con un podcast sobre productividad, que igual no vas a aplicar.
Brendon Burchard diría:
“¡Basta! Haz lo que importa. Una cosa a la vez. Con intención.”
Pero yo tenlo digo con más humor y sin culpa:
Deja de intentar ser pulpo. Haz una cosa bien, y después otra. Punto.
Lo urgente no siempre es importante
Ejemplo clásico:
Querías escribir ese proyecto que viene dando vueltas hace meses
Pero primero contestaste ese correo que no pedía respuesta.
Después abriste Instagram “solo por 5 minutos” (mentira).
Y cuando te diste cuenta, estabas ordenando calcetines y limpiando el teclado.
¡Productividad modo placebo activado!
Querías escribir ese proyecto que viene dando vueltas hace meses
Pero primero contestaste ese correo que no pedía respuesta.
Después abriste Instagram “solo por 5 minutos” (mentira).
Y cuando te diste cuenta, estabas ordenando calcetines y limpiando el teclado.
¡Productividad modo placebo activado!
¿Cómo identificar lo que SÍ importa? (sin entrar en crisis existencial)
- Pregunta mágica: ¿Esto me acerca o me aleja de mi meta real?
- Top 3 diario: ¿Cuáles son las 3 acciones que sí o sí moverán la aguja hoy?
- Bloquea tiempo como si fueras Beyoncé: Si no lo agendas, no pasa.
- Elimina las cosas sin gracia: Si no te lleva a donde vas, no pierdas ni media neurona en eso.
Reflexión final: ser productiva no es hacer más, es hacer mejor
No estás aquí para ser una máquina de tareas.
Estás para brillar, crear y dejar huella (y si puedes, con glamour incluido).
Estás para brillar, crear y dejar huella (y si puedes, con glamour incluido).
Así que la próxima vez que digas estoy ocupada, asegúrate de que también puedas decir:
Estoy avanzando
Y si no… bueno, al menos ríete de ti misma y vuelve a enfocarte. ¡Nadie lo hace perfecto, pero se puede hacer más consciente!
